lunes, 7 de diciembre de 2009

Grassrots globalization and the Research Imagination.

Global Cities and Circuits of global Labor. The case of Manila, Philippines.

Global cities

The return of the Sweatshop

Cosmópolis. La globalización del espacio urbano.

Urban economy an Fading Distance

Overview of global cities

INDICADORES

INDICADORES DE DELINCUENCIA EN EL D.F


DF, ENTRE LAS CIUDADES CON MÁS DELINCUENCIA: ICESI

El Instituto Ciudadano de Estudios Sobre la Inseguridad (ICESI) reveló que 13 zonas metropolitanas, entre ellas la de la ciudad de México, concentran más de la mitad de los delitos que ocurren en el territorio nacional.Una investigación del ICESI expuso que ciudades como Culiacán, Tijuana, Mexicali, Guadalajara, Acapulco y el Distrito Federal duplican la media nacional de 11 mil 246 delitos por cada cien mil habitantes.En conferencia de prensa, el presidente de ese instituto, Luis de la Barreda Solórzano, dijo que las 13 ciudades concentran 32 por ciento de la población nacional estimada en 2004, lo que confirma el peso que tienen las zonas urbanas en la criminalidad del país.Indicó que las 13 urbes con más incidencia delictiva, de acuerdo con el estudio, son: Acapulco, Cancún, México, Ciudad Juárez, Chihuahua, Cuernavaca, Culiacán, Guadalajara, Mexicali, Monterrey, Oaxaca, Tijuana y Villahermosa.El informe destacó que el área de la ciudad de México concentra altos niveles de delincuencia no sólo por ser una gran urbe, sino por la división política de sus delegaciones y municipios que pertenecen a tres entidades federativas: el Distrito Federal y los estados de México e Hidalgo.Por tanto, subrayó que los índices delictivos no se pueden reducir y ni siquiera se puede planificar en forma adecuada un programa metropolitano de seguridad pública en la ciudad de México sin la participación de los gobiernos que confluyen en ella.En tanto, el área metropolitana de Monterrey, que es una ciudad que por el número de habitantes ocupa el tercer lugar en el país, se ubica por debajo tanto del resto de las 13 ciudades analizadas como de la media nacional.La Encuesta Nacional Sobre Inseguridad (ENSI-III) indicó que los delitos en casa-habitación y robo son los más frecuentes, pues de 10 agresiones ocho se producen en el hogar, además de que la mayoría de las víctimas son mujeres.En este sentido, expuso el hecho de que la mayor proporción de agresiones se presente en el hogar hace considerar que también existe un grave problema de violencia familiar, lo que exige diseñar programas que la prevengan y atiendan, puntualizó.Otro caso importante es el de Ciudad Juárez, donde 57 por ciento de las mujeres sufre agresiones en su lugar de trabajo, toda vez que la mayor parte del personal de las maquiladoras pertenece a este género.Asimismo, señaló que existen áreas metropolitanas donde el porcentaje de agresiones en la calle contra mujeres incluso se quintuplican, como en Villahermosa, ciudad de México y Acapulco.En la encuesta se estableció que la sociedad todavía no tiene confianza en las corporaciones policiacas, pues se tiene la percepción de que están coludidas con la delincuencia.






LAS COLONIAS CON MAS DELINCUENCIA DEL DF. LAS PEORES COLONIAS DE MEXICO

La procuraduría capitalina dio a conocer los nombres de las 25 colonias que acumularon la mayor incidencia delictiva durante el primer semestre de 2009, siendo las colonias Centro, Doctores y Del Valle las que encabezan la lista.

Los datos señalan que estas 25 colonias acumulan 18 mil 947 de las 91 mil 649 denuncias que se han presentado en lo que va del año en la ciudad, es decir 20.71% del total de averiguaciones previas por actos ilícitos del fuero común.
La delegación Cuauhtémoc acumula nueve de estas 25 colonias conflictivas; en tanto Benito Juárez, Gustavo A. Madero y Venustiano Carranza cuentan con tres cada una; Coyoacán, Miguel Hidalgo e Iztacalco con dos respectivamente, e Iztapalapa con una.
La colonia con la mayor incidencia delictiva es Centro, delegación Cuauhtémoc, con dos mil 989 delitos denunciados, lo que representa un promedio diario de 61.5 averiguaciones previas que equivalen a 3.26% del total de la ciudad.
En segundo sitio se ubica la colonia Doctores, también en Cuauhtémoc, con mil 509 averiguaciones con un promedio diario de 8.3 denuncias, lo que representa el 1.64%.
La colonia Del Valle en la delegación Benito Juárez se ubica en tercer posición con mil 299 denuncias, con un promedio de 7.2 averiguaciones diarias que representa 1.42% del total.
Le sigue la colonia Roma, en Cuauhtémoc, con mil 39 denuncias en el primer semestre de 2009; Narvarte en Benito Juárez con 975; Agrícola Oriental en Iztacalco con 885; y la Unidad Habitacional San Juan de Aragón en Gustavo A. Madero, con 795.
Siguen en la lista las colonias Guerrero, con 742 Juárez con 668; Morelos con 653; Obrera, con 613, y Santa María la Ribera, con 608 denuncias, todas en la demarcación Cuauhtémoc.
Pantitlán, en Iztacalco con 582; Anáhuac en Miguel Hidalgo con 555; y Portales en Benito Juárez con 542, también aparecen en el documento.
En tanto, la colonia Jardín Balbuena, en Venustiano Carranza, registró 538 denuncias; Pedregal Santo Domingo, en Coyoacán, 499; Moctezuma Segunda Sección, en Venustiano Carranza, 488; Juan Escutia, en Iztapalapa, 453, y Lindavista, en Gustavo A. Madero, con 453.
La lista de las 25 colonias más peligrosas la cierran U. Hab. Obrero CTM Culhuacán en Coyoacán, con 439 averiguaciones; Roma Sur, en Cuauhtémoc, con 425; San Felipe de Jesús, en Gustavo A. Madero, con 421; Tacuba, en Miguel Hidalgo, con 394, y Merced Centro, en Venustiano Carranza con 383.
En cuanto a delegaciones, Iztapalapa es la de mayor incidencia delictiva pues registró en el primer semestre del año 13 mil 849 denuncias que equivalen a 15.11% de las 91 mil 649 que se han presentado en la ciudad.
Le sigue con poca diferencia Cuauhtémoc, con 13 mil 844 averiguaciones previas, que equivalen a 15.10% del total, y Gustavo A. Madero, con 11 mil 148 denuncias.
En tanto, Benito Juárez registró seis mil 847 denuncias, Coyoacán 6 mil 416; Miguel Hidalgo seis mil 135; Venustiano Carranza cinco mil 678; Álvaro Obregón cinco mil 394; Tlalpan cinco mil 90; Azcapotzalco cuatro mil 762; Iztacalco tres mil 968; Xochimilco tres mil 18, y Tláhuac dos mil 209.
En contraparte, la Procuraduría General del Justicia del Distrito Federal precisó que las delegaciones con la menor incidencia son: Cuajimalpa, con mil 324 denuncias; Magdalena Contreras, con mil 303, y Milpa Alta, con 624, además de que hay sin ubicar 40 averiguaciones más.
Del total de delitos denunciados en la primera mitad del año, 34 mil 419 fueron cometidos con violencia y 57 mil 230 sin violencia.
Los ilícitos más comunes fueron robos en sus distintas modalidades, lesiones, violaciones y homicidios







INDICADORES DE MARGINALIDAD DEL D.F

CHOCAN CIFRAS DE CONAPO Y GDF SOBRE ÍNDICES DE MARGINALIDAD


Para las autoridades de la ciudad más de 6 millones enfrentan media y muy alta marginación.

Para el Consejo Nacional de Población (Conapo), el Distrito Federal es una de las entidades del país con los índices más bajos de marginalidad, puesto que sólo 0.2 por ciento de su población tiene un grado muy alto de marginación.
En un estudio, en el que mide el grado de marginalidad con base en tres variables: educación, vivienda y disponibilidad de bienes, la instancia federal afirma que sólo 50 mil 994 de los más de 8 millones 500 mil habitantes de la ciudad de México viven en condiciones de marginación media, alta y muy alta, sobre todo en las delegaciones Milpa Alta, Xochimilco y Tlalpan.
Sin embargo, estadísticas de 2004 del gobierno capitalino, que incluyen variables como nivel de ingresos y acceso a servicios de salud, señalan que son 6.3 millones de capitalinos los que tienen niveles medios, alto y muy alto de marginalidad, cifras que coinciden con las dadas a conocer recientemente por el Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria, que indican que más de 72 por ciento de la población de la ciudad de México vive con altos índices de marginación.
En su informe Índice de marginación a nivel localidad 2005, publicado en julio pasado, el Conapo tomó como indicadores para medir el grado de marginación en el país, la población mayor de 15 años analfabeta o que no terminó la primaria, viviendas que no cuentan con servicios como agua entubada, energía eléctrica, tienen piso de tierra o viven con algún nivel de hacinamiento, además de casas sin refrigerador.
Así, según el Conapo, en la ciudad de México únicamente hay 23 personas que viven con niveles muy altos de marginación, 12 en la delegación Milpa Alta y el resto en Xochimilco, además de que en esas mismas demarcaciones 3 mil 598 y 3 mil 180 habitantes, respectivamente, tienen grados altos, mientras que en Tlalpan 4 mil 330 personas tienen niveles medios de marginación.
Las cifras del Conapo contrastan con las del gobierno capitalino, que en el informe Panorama socioeconómico y de marginación del Distrito Federal señala que más de 6 millones de habitantes padecen un grado de marginalidad entre medio y muy alto.
En dicho estudio, realizado por la Coordinación de Planeación y Desarrollo del GDF en 2004, se toman en cuenta además variables como el nivel de ingresos y del que se desprende que 29 por ciento de la población percibe entre menos de uno y dos salarios mínimos, mientras que 5.1 por ciento no percibe ingresos.
Entre otros datos, el documento resalta que 3.9 millones de capitalinos no tienen acceso a servicios de salud; y en lo que se refiere a la disponibilidad de bienes indica que mientras 299 mil familias no disponen de refrigerador, 712 mil no cuentan con servicio telefónico y 549 mil no tienen calentador de agua (bóiler).
Estás estadísticas de la administración capitalina son más cercanas a las del Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria que a las del Conapo, que indica que 71. 6 por ciento de la población de la ciudad se ubica en los grados de marginación muy alto, alto y medio; de ese porcentaje, 25.2 por ciento corresponde al primer grupo, mientras que sólo 16.6 por ciento tiene un grado de marginalidad muy bajo.
En su Informe sobre situación de los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales en el Distrito Federal, la ONG señala que 5.4 por ciento de los capitalinos se ubican en la línea de pobreza alimentaria –sus ingresos no son suficientes para adquirir alimentos–, 10.3 por ciento en pobreza de capacidades y 31 por ciento en pobreza de patrimonial.


Fuente:
http://www.jornada.unam.mx/2007/12/27/index.php?section=capital&article=027n1cap

Link:
http://www.coneval.gob.mx/contenido/med_pobreza/3023.pdf



INDICADORES DE CRIMINALIDAD Y VIOLENCIA


EL DF, CUARTA CIUDAD MÁS INSEGURA DEL MUNDO

La incidencia delictiva, mayor que en Tijuana y Mexicali, advierte Obdulio Ávila.


Con una incidencia de 24 mil 878 delitos por cada cien mil habitantes, la zona metropolitana del valle de México se convirtió ya en la cuarta concentración urbana más insegura del mundo, además de su alarmante grado de violencia, pues ocho de cada diez robos se cometen a mano armada y en tres de cada diez casos los delincuentes hieren a sus víctimas.
Así lo advirtió el legislador panista Obdulio Ávila, presidente de la Comisión de Desarrollo Metropolitano de la Cámara de Diputados, al subrayar que el nivel de criminalidad en el Distrito Federal y su zona conurbada duplica la media nacional, que es de 11 mil 246 delitos por cada 100 mil habitantes.
Incluso, indicó el diputado, la incidencia delictiva aquí es mucho más alta que en Tijuana y Mexicali, que con 19 mil 383 y 19 mil 141 delitos, respectivamente, ocupan el segundo y el tercer lugar nacional en materia de inseguridad.
“Un dato alarmante (en la zona metropolitana del valle de México) es el rango de edades de los delincuentes, (pues) nueve de cada diez delitos son cometidos por menores de 36 años de edad y cuatro de cada diez por jóvenes de 19 a 25 años de edad, agregó.De acuerdo con el análisis de la Comisión de Desarrollo Metropolitano de la Cámara de Diputados, el uso de armas es proporcionalmente mayor entre los delincuentes adolescentes de 12 a 18 años, así como en los mayores de 45 años de edad.
Ávila puntualizó que la alta criminalidad de la zona metropolitana del valle de México no sólo se mide por los grandes delitos, sino por los pequeños y repetidos actos que engendran perversidad, hábito y mayor peligro.
En ese contexto, el legislador de Acción Nacional reprobó el desempeño de las autoridades capitalinas, pues dijo, los gobiernos perredistas que han encabezado la ciudad no han demostrado eficacia ni habilidad política para abatir el problema de la inseguridad.
Más aún, añadió, el gobierno local tuvo que seguir el ejemplo de las autoridades federales y hacer su aparición espectacular en el barrio de Tepito, cuando esto no es una competencia, sino un asunto fundamental que exige acciones contundentes y coordinadas.
Es momento de dejar atrás el show y comenzar a trabajar por la satisfacción de las necesidades de quienes nos eligieron como representantes”, puntualizó.
Crecimiento
La incidencia delictiva en el Distrito Federal y su zona conurbada creció 21 por ciento entre 2004 y 2005, al pasar de 20 mil 525 hasta 24 mil 878 delitos por cada cien mil habitantes.
Según el Instituto Ciudadano de Estudios sobre la Inseguridad, en tres de cada diez viviendas de la zona metropolitana del valle de México existe por lo menos una víctima de la delincuencia.
Ocho de cada diez delitos cometidos aquí tienen lugar en la vía pública o en el transporte de pasajeros, de acuerdo con estudios del referido organismo ciudadano.

Fuente: http://impreso.milenio.com/node/7028560

Comentario comparativo de las películas Ciudade de Deus, Tropa de elite y La zona

Urban violence and Insecurity: An introductory Roadmap

DRUG MARKET AND URBAN VIOLENCE

Actualmente pensar en la violencia urbana nos lleva necesariamente a pensar en el mercado de drogas, todo parece indicar que existe una correlación, y es que la extensión del mercado de las drogas a nivel local y trasnacional ha traído como consecuencia un significativo aumento de la violencia en gran parte de las urbes del mundo. Esta situación nos lleva a preguntaros ¿Por qué la expansión del mercado de las drogas está íntimamente ligada al aumento de la violencia urbana?
En la lectura se mencionan tres tesis acerca de la conexión existente entre violencia y tráfico de drogas. La primera tesis vincula a la violencia y a las drogas a factores psicofarmacológicos, ya que se considera que los consumidores de drogas son violentos bajo los influjos de la droga. La segunda tesis asegura que el factor económico-compulsivo potencializa la violencia, debido a que los adictos a las drogas presenten cuadros de ansiedad y si no cuentan con la solvencia económica para abastecerse de la dosis que necesitan, harán cualquier cosa por obtenerla, llegando incluso a cometer delitos de diversa índole contra cualquier persona. Por último, la tercera tesis nos habla de la violencia sistemática, la cual es inherente al tráfico de drogas, ya que el mercado de drogas al no estar sujeto a reglas y al ser un negocio que deja grandes ganancias, ocasiona que todos los ofertantes vivan en una disputa constante por el dominio de los clientes y del territorio, es pues, una lucha por el poder y el liderazgo entre los carteles. Además de lo antes mencionado, la venta de drogas es ilegal, por lo cual los gobiernos combaten a los carteles, ocasionando una tremenda trifulca que deja como resultado, atentados, balaceras y muertes.


Las tres tesis son validas y comprobables en la realidad, y es que es incuestionable que el narcotráfico está íntimamente relacionado con la violencia, ya que es una actividad ilícita cuya lógica de poder ilegal es de naturaleza violenta, pues para llevarse a cabo se hace uso de la fuerza ilegal, se corrompe a las instituciones y se degrada y desintegra al tejido social. Además el tráfico de drogas genera otros delitos, tales como el tráfico de personas, tráfico de armas, lavado de dinero, corrupción, entre otras.


El problema de la violencia urbana a causa del mercado de las drogas no es exclusivo de las ciudades de países subdesarrollados, pues también vemos que ciudades de países desarrollados, como Nápoles en Italia, se encuentran cercadas por este grave problema, aunque en Latinoamérica el problema se ha agudizado a causa de los factores económicos, políticos y sociales.

México es el país latinoamericano que actualmente se encuentra más abatido por el problema, ya que a partir de que el gobierno de Felipe Calderón decidió emprender la “guerra contra el narcotráfico” (2007) los niveles de violencia se dispararon. Esta situación se ha dado, ya que la estrategia del gobierno fue mala, ya que pensaban que cortando las cabezas de líderes de organizaciones dedicadas al tráfico de drogas las iban a desarticular, sin embargo, actualmente estas organizaciones operan con un nivel de violencia mayor y sus estructuras ya no se encuentran supeditadas en un líder, por lo cual, aun con la captura del líder la organización sigue operando bajo el mando de sicarios, lo cual ha hecho que se intensifique el combate entre dichas organizaciones y las autoridades. A parte de que el gobierno emprendió una guerra con una mala estrategia, perdió de vista que combatir a organizaciones violentas con violencia generaría el horror y terror en varias ciudades del país, tal es el caso de Juarez, Morelia. Tamaulipas, entre otras.


Considero que la violencia relacionada con el narcotráfico es inherente, por lo cual lo único que podría disminuir dicha violencia, sería legalizar las drogas o pactar con las organizaciones, de lo contrario, se seguirá propagando e intensificando la violencia.

The Dangerous others: Changing view on Urban Risks and Violence in France and the United States de Sophie Body-Gendrot

domingo, 6 de diciembre de 2009

CITY OF GOD

“Ciudad de Poder, Ciudad sin Ley, Ciudad a la deriva, Ciudad sin Dios”

La película Ciudad de Dios refleja la realidad que se vive día a día en las favelas brasileñas, por ello Diken hace un análisis político en donde encuentra elementos interesantes que nos llevan a pensar y a cuestionar la existencia del Estado Moderno.
¿Por qué pensar y cuestionar la existencia del Estado Moderno? Si bien, s piensa que el Estado Moderno, con su fuerza material, representa el orden y la seguridad; y que vive y se desarrolla dentro de la atmosfera del Derecho, dado que es lo que da fundamento a su legitimidad y justificación, sin embargo, vemos claramente que la descripción del Estado Moderno no encaja con la realidad, ya que en Brasil, como en otros países del mundo, su papel ha dejado mucho que desear, y es que el Estado Moderno no se ha caracterizado por ser un Estado de Derecho.
El Estado de Derecho debe tender a mantener la seguridad y la certeza como condición previa para la realización de los valores más altos, como serían la justicia y el bien común, sin embargo, en los países en vías de desarrollo, dicho Estado de Derecho suena ha utopía irrealizable, ya que factores como la globalización y la economía hacen imposible la aplicación de esos preceptos. En este sentido, el Estado no posee la fuerza ni el poder suficiente como para hacer efectiva la seguridad dentro del territorio y cuando esto sucede, la fuerza y el poder se fragmentan, lo que da pie a la formación de Sub-Estados paralelos.
Estos Sub-Estados se forman, sobre todo, en comunidades excluidas de la dinámica social y económica que se desarrolla dentro de la incipiente esfera estatal. Son producto de la descomposición humana y social, ocasionada por la exclusión y la marginación en que viven las comunidades, pero también es producto de la degradación del Estado mismo.

La característica principal de los Sub-Estados es que se vive en un estado de naturaleza, estado que ocasiona la discordia por el poder, la violencia y la incertidumbre. El poder dentro del Sub-Estado lo detentara aquel que logre el imperio de la violencia, quien sea capaz de controlarlos a todos mediante la coerción, sin embargo, dicho poder siempre estará en boga y será efímero.

En suma, los Sub-Estados cuentan con dinámicas económico-sociales propias, con relaciones de poder perversas y con reglas no escritas. Dentro de estos siempre se vive en la zozobra, en la miseria humana, en la disputa y entre la vida y la muerte.

martes, 27 de octubre de 2009

FORTIFIED ENCLAVES: THE NEW URBAN SEGREGATION

Teresa Caldeira, al igual que Mike Davies, aborda el tema de las colonias residenciales y las “privadas”, solo que pone énfasis en el caso de la ciudad de Sao Paulo en Brasil (aunque también analiza el caso de los Ángeles) y ahonda más en el contexto que envuelve a estos espacios, pero principalmente enfoca su atención a la seguridad que permea a los enclaves. La tesis de Teresa es que los enclaves modifican las relaciones sociales, el espacio público y la vida pública.

Los enclaves son creados bajo el pretexto de la inseguridad, la violencia y la incapacidad del gobierno por hacer efectivo el Estado de Derecho, y es que los enclaves fortificados son aquellas residencias, privadas o edificios que son exclusivos y en la que se asientan personas de clase alta o media, pero que además se caracterizan por estar cercados o bardeados, y por si fuera poco, cuentan con altos dispositivos de seguridad y vigilancia, son, en pocas palabras “imponentes fortalezas” que aíslan a la clase acomodada de la violencia citadina, de el paisaje urbano, y del conglomerado de personas de la “prole”. Los enclaves son el resultado de la descomposición social y de las desigualdades económicas prevalecientes en el contexto contemporáneo, por ello forman pieza clave y fundamental del proceso de crecimiento y reorganización de las ciudades no solo en el espacio físico, sino también en el plano social[1]. En este sentido, para explicar mejor el proceso de crecimiento y reorganización de Sao Paulo, Teresa hace todo un análisis en el que describe como desde la década de los 80´s se fueron gestando los cambios estructurales de la urbe, y es que con la ola privatizadora el desmantelamiento del Estado provoco el encarecimiento del grueso de la población y con ello se incremento el número de habitantes en las favelas y a su vez, el aumento de las favelas, los índices de delincuencia se incrementaron abruptamente lo que permeo a la ciudad de un ambiente tenso y violento, por lo cual ante la incapacidad del gobierno por hacer frente al problema, los privados y las grandes constructoras comenzaron a llevar a cabo una serie de proyectos inmobiliarios enfocados a la clase acomodada, pues ofrecían lujosas viviendas, servicios y un estilo de vida de buen nivel, y además seguridad y convivencia vecinal entre iguales, de esta manera paulatinamente las clases medias y ricas fueron habitando estos enclaves gracias a la publicidad que, hasta la fecha, presenta a estos sitios como lugares exclusivos, a la paranoia ocasionada por la violencia y el status que da vivir ahí, así de esta manera se fue conformando la urbe moderna, esa urbe desigual llena de contrastes.

Concluyendo, podemos decir que la conformación de los enclaves trastornaron aun más la estructura de las ciudades contemporánea, pues en miras de crear un espacio más abierto, más público y mas transitable, se genero el efecto contrario, se volvió un lugar cuasi-privado, excluyente e intransitable, pues por doquier hay barreras y a su vez estas características del espacio físico han generado tensiones sociales, mayor y marcadas desigualdades, discriminación, envidia, resentimiento, estigmatización de la pobreza y violencia.

[1] Nota: En este sentido, quisiera puntualizar que tanto en Sao Paulo como en los Ángeles las ciudades han mostrado una tendencia al crecimiento y no al desarrollo, pues el desarrollo sería el proceso evolutivo de toda la urbe y de todos sus habitantes, mientras que el crecimiento es solo a la expansión de la urbe y la parcial evolución en alguna o escasas zonas.

lunes, 26 de octubre de 2009

FORTRESS L.A


Mike Davies hace una crítica sobre el proyecto de urbanización gestado en la Ciudad de los Ángeles, ya que dicho proyecto fue de segregación y de polarización, pues se empeño en privatizar los espacios públicos y en marcar la diferencia en el espacio físico entre pobres y ricos.
Los espacios públicos fueron privatizados y muchos de ellos se convirtieron en centros comerciales, parques de recreación privados o en grandes clubes deportivos.


La segregación y polarización fue más notoria pues se separaron a las comunidades ricas de las pobres. Se construyeron “privadas” y colonias “residenciales” para los adinerados, mientras que a los marginados se le reubico en zonas periféricas para que su presencia fuera poco notoria.

Las privadas y colonias residenciales se caracterizan por ser zonas exclusivas, en las que se ofrecen servicios de calidad, seguridad de primer nivel con cámaras de circuito cerrado y vigilancia privada capacitada, pero sobre todo ofrece apartarse de la gran urbe, de sus problemas y del ajetreo que en ella prevalece y de la clase pobre. Son, pues, una suerte de islas fortalezas en las que se experimenta otra clase de vida.

Las zonas periféricas marginadas son lugares marcados por el abandono, pero no solo eso son también blanco perfecto para el abuso de poder, ya que al etiquetárseles como zonas de delincuencia constantemente sufren los atropellos de la autoridad en los constantes cateos que realizan con el fin de “combatir a la delincuencia”.

En suma, la Ciudad de los Ángeles fue planeada para ser un espacio cuasi-privado en donde solo la clase adinerada accede a la recreación, a los servicios y a las vialidades, mientras que la clase pobre solo está ahí para ser la fuerza laboral de las residencias, los centros comerciales y demás sitios privados.

THE HOMLESS BODY

En la actualidad a menudo nos encontramos en la calle con “indigentes”, “niños de la calle” o indígenas, cuántas veces hemos visto como estos personajes de la urbe viven en el espacio público y solo volteamos indiferentes o simplemente los ignoramos.
¿Alguna vez hemos reflexionado como es que llegaron ahí, como es que se convirtieron en míseras ornamentas de la urbe? Pocas veces lo hemos hecho, por ello, Samira Kawash nos invita a reflexionar sobre este problema urbano contemporáneo.

La situación de calle en la que viven muchos individuos esta asociada a factores económicos, de adicción, de desintegración familiar, a la discapacidad mental o las enfermedades mentales e incluso por la edad.
El factor económico es uno de los principales factores que detonan y agravan el problema de la pobreza, lo cual ocasiona que miles de personas sean incapaces de pagar una renta o de adquirir una vivienda generando que muchos se queden “sin hogar”.

Sin embargo, no importando cual sea el factor que los haya colocado en esa situación a los “sin hogar”, todos son golpeados por la exclusión y la discriminación social y política desde el momento en que habitan el espacio público.

El espacio público que cobija a los “sin hogar” es el mismo que los mantiene o hunde en ese estatus, pues es un espacio vacío que solo genera que las condiciones de vida sean precarias, pues niega a los sin hogar los servicios más básicos como el uso de sanitarios o el servicio de duchas, y es que este espacio público ha sido absorbido por el espacio privado, y por tanto, deja los sin hogar sin ninguna alternativa. Cada día que pasa un sin hogar en la calle, es un día en el que su vida se deteriora y en el que su dignidad humana se desvanece y por ello le es muy difícil superar ese estatus.

No hay políticas públicas encaminadas a crear espacios en los que se dé alojo a personas en condición de calle, y es que no hay interés ni voluntad de las autoridades, puesto que los sin hogar se vuelven invisibles. Tal vez los únicos que se interesan por ellos y en poca medida son las ONG´s o los grupos religiosos, de ahí en fuera ni la misma sociedad se interesa por esas personas. Por ello los “sin hogar” están condenados a la miseria, a la insalubridad, a la exclusión y a la discriminación.

Es lamentable como la sociedad perciba como algo normal y cotidiano que haya personas sin hogar y que se muestren totalmente desinteresadas.

THE THIRD SPACE

El contexto político actual es permeado por el sentido democrático, donde los diversos actores sociales se hacen escuchar y son escuchados, donde tienen derecho a influir en las decisiones gubernamentales, donde la pluralidad de ideas convergen, donde el derecho a la diferente es inquebrantable, y sin embargo, vemos que en el plano real esto es totalmente adverso, pues hay actores sociales que quedan excluidos de participar e influir en las decisiones políticas, las únicas voces que son escuchadas son aquellas que llevan consigo poder económico o político, por tanto, no existe pluralidad sino unilateridad, el derecho a la diferencia, no es un derecho sino una etiqueta que impide el progreso de los individuos en esa condición.



En este sentido, Edward Soja hace toda una reflexión acerca del nuevo contexto que impide mecanismos que generen la pluralidad y la participación institucional de actores diferentes, en desventaja. Plantea que la dinámica económica, social y política inherentemente ha generado desigualdades entre los individuos y los ha dejado en una posición de exclusión y marginación, cosa que les impide manifestarse hacerse notar. Para Edward estos individuos deben romper con las barreras del espacio público subjetivo, para ello deben superar su condición de marginados y excluidos, no esperando que la demás sociedad o el gobierno les reconozca, sino organizándose y buscando auto-integrarse para hacerse notar, para manifestar a todo el conjunto social y político que sí forman parte de la sociedad, que sí son ciudadanos y que por ende tienen derechos como cualquier otro ciudadano. Es pues, su derecho a ser diferentes, ha ser de escasos recursos, pero no ser marginados ni excluidos del sistema social y político.




Para generar esta reintegración a la vida política los “diferentes” deben construir el tercer espacio, ese espacio en el cual converjan e interactúen los diversos actores, una arena donde la equidad prevalezca, donde los individuos se reconozcan los unos a los otros, no importando el estatus que tengan. En suma, sería un espacio abierto, democrático y plural, donde se empoderan los "diferentes".

PROYECTO DE DHAKA

SQUATTERS AND THE CITIES OF TOMORROW


Robert Neuwirth aborda el problema de los ocupantes ilegales desde una perspectiva más humana ya que se adentro y vivió durante dos años en las comunidades de ocupantes ilegales de Brasil, Turquía, Kenia y la India, por ello no percibe a las comunidades como una estadística de pobreza y marginación, sino comunidades que enfrentan a diario desafíos y experiencias de vida.
Robert a través de su ensayo refuta los tres mitos populares formados en torno a las comunidades de ocupantes ilegales, tales como: 1) Que éstas comunidades son emblemas de la miseria humana; 2) Que las personas que habitan éstas comunidades son empobrecidos y muertos de hambre y; 3) Que los ocupantes ilegales son el enemigo de la sociedad civil.

En el primer mito Robert argumenta que las comunidades de ocupantes ilegales no son emblemas de la miseria humana, ya que en esas comunidades existen personas trabajadoras y emprendedoras, que luchan por sobrevivir, por salir adelante, por mejorar sus condiciones de vida.

El segundo mito que dice que los habitantes de esas comunidades son empobrecidos y muertos de hambre lo cual es, en cierta medida, falso, debido a que las personas trabajan o se subemplean, de alguna u otra manera buscan la manera de cubrir sus necesidades e incluso se solidarizan con los más desfavorecidos.

El tercer y último mito es falso, pues las comunidades de ocupantes ilegales forman parte de la sociedad, pues constituyen la base de ésta, forman parte del sistema e incluso se organizan para hacerse escuchar ante las autoridades.

Concluyendo, podemos decir, que las comunidades de ocupantes ilegales constituyen subsistemas sociales que se inserta en el gran sistema. En este sentido, lo concebimos como subsistemas, pues cada comunidad genera sus propias reglas y valores, tiene una peculiar interacción social, tiene sus propios modos de vida que permiten la sobrevivencia, en todas las comunidades tienen un subsistema económico informal que les permite el intercambio de mercancías por efectivo, pero también algunos de los habitantes de las comunidades se insertan en el sistema económico formal aportando así algo al gran sistema. Son pues, comunidades en donde habitan seres humanos de carne y hueso, que aunque carentes de recursos, de servicios y de formación educativa, saben cómo enfrentar los retos y desafíos que se le presentan, eso habla de que son personas fuertes… Quizá son de los seres humanos con más potencial, pues luchan día a día por sobrevivir en medio de las tempestades.

URBAN INEQUALITY AND SOCIAL EXCLUSION


La desigualdad urbana y la exclusión social son uno de los principales problemas que permean a las ciudades contemporáneas. La desigualdad y la exclusión son alimentadas por los problemas de pobreza, desempleo, marginación, analfabetismo, segregación espacial y discriminación de género y racial y éstos problemas, a su vez, son consecuencia de la dinámica económica, política y social.


La dinámica económica ha favorecido a la acumulación y concentración de capital en unos cuantos países y dentro de cada países se concentra y acumula en la élite empresarial; la dinámica política se ha visto influida por intereses económicos e individuales, lo cual ha generado que los gobernantes se muestren desinteresados e insensibles ante los problemas de pobreza y marginación; y la dinámica social se da dentro de un espacio público cada vez más vacio, donde la división de clases es más marcada (pobres vs ricos), donde el reconocimiento de unos y otros individuos está condicionado al estatus que posean. Es así como las nuevas dinámicas son el origen del binomio desigualdad-exclusión y dicho binomio se inserta y arraiga dentro de las ciudades y esto hace que éstas sean espacios con problemas complejos, espacios donde la tensión social es latente.

Para tener una noción más amplia del conflicto que a diario se vive en las ciudades es necesario conceptualizar que es la desigualdad urbana y como se da la exclusión social dentro de la gran urbe.

La desigualdad urbana deviene de esa diferencia económica que hay entre los individuos (mientras pocos poseen mucho capital, muchos poseen poco o nada de capital), a partir de esa situación se desencadenan diferencias como las desigualdades en la propiedad, en el acceso a los servicios, en el espacio físico, en las oportunidades de desarrollo humano, entre muchas otras.

La desigualdad en la propiedad se refiere a que mientras hay individuos que poseen ésta, hay otros que no poseen.

La desigualdad en el acceso a los servicios es dada porque hay individuos que por vivir en zonas “opulentas” “chic” tienen acceso a servicios de agua potable, luz, drenaje, entre otros, mientras hay otros que ni siquiera tienen acceso a los servicios básicos.

La desigualdad en el espacio físico es aquella en la que los entornos urbanos se tornan agradables o desagradables de acuerdo al estatus económico que tengan los individuos que ahí se desenvuelvan o habiten y al valor de las propiedades de la zona, es decir, en una zona “chic” encontraras calles limpias, pavimentadas y con alumbrado público, parques en óptimas condiciones, infraestructura, etc., mientras que en zonas “marginadas” encontraras calles llenas de basura y excremento, con pavimento o sin pavimento, con alumbrado o sin alumbrado, sin parques o con parques en deplorables condiciones, con una escasa infraestructura.

Finalmente, la desigualdad de desarrollo humano es aquella en la que los individuos adinerados tienen acceso a educación de integral y de calidad, a la recreación y a otro tipo de cosas que les permite desarrollar todas sus potencialidades, mientras que los individuos pobres en ocasiones no tienen acceso a la educación o si tienen acceso a ésta es carente, poca o nulamente tienen acceso a la recreación, por lo cual raramente podrá desarrollar sus potencialidades.

La exclusión social es proceso el cual niegan ciertos individuos el acceso a las posiciones y recursos para vivir una vida completamente participativa. La exclusión social que se da dentro de la urbe se asocia a las desigualdades. La exclusión social abarca varios tipos de exclusión como la laboral, de derechos, entre otros tipos de exclusión.

La exclusión social se da por las marcadas diferencias sociales, se excluye a aquellos individuos que viven en condiciones precarias, pues generalmente a éstos se les asocia con el crimen y la delincuencia, lo cual crea desconfianza en ellos. La exclusión laboral se da porque los individuos pobres generalmente carecen de educación y capacitación técnica que les permita insertarse al mercado laboral, por lo cual se ven obligados a insertarse al mercado informal o a la delincuencia, pero también se da cuando las personas envejecen, pues por lo general el mercado emplea a personas jóvenes. La exclusión de derechos se da porque las autoridades niegan a las personas con escasa educación y/o con facha de “pobre” o “vagabundo” sus derechos como ciudadanos, pero también les son negados porque los desconocen.

Hemos hecho un análisis de la desigualdad y la exclusión y de ello podemos concluir que son situaciones desagradables que generan frustración en los individuos en condiciones de pobreza, por lo cual se crea una tensión social que genera violencia.

En suma, el entorno urbano es contrastante, diverso, en el convergen injusticias sociales como la pobreza, la marginación, el desempleo, la segregación y la discriminación, lo cual fragua el terreno para una ciudad violenta e insegura, por ello es necesario y urgente que se emprendan acciones encaminadas a moderar éstas situaciones que ponen en peligro la estructura social.

lunes, 7 de septiembre de 2009

DEMOCRACIA PROFUNDA


Esta lectura nos invita a reflexionar sobre el actual sistema pseudo-democrático que prevalece en la mayoría de los países del mundo, y hablo de sistemas pseudo-democráticos, porque en la mayoría éstos existen problemas de desigualdad social, lo cual refleja, claramente, que los gobernantes viven de la política y no para la política y en este sentido, sirven a intereses particulares (intereses de la élite económica y política) y sus políticas no reflejan en lo más mínimo las aspiraciones de la mayoría de la población.


Ante el deterioro de la calidad de vida y la negativa de los gobiernos por atender los problemas de pobreza, la población encuentra como mecanismos de defensa la lucha armada o la formación de asociaciones o sindicato.


Appaduray plantea que el mejor mecanismo de defensa que tiene la población más desfavorecida, es la formación de organizaciones. Nos presenta el caso de la ciudad de Mumbay (se localiza al oeste de la India), en esa región se formaron tres organizaciones que tienen como objetivo principal atender los problemas de pobreza urbana, dichas organizaciones se conformaron posteriormente en una sola organización denominada “Alianza”, esto con el objetivo de hacerse visibles dentro del sistema político para que fueran escuchadas sus demandas y a su vez para que los integrantes de las distintas organizaciones lograran generar mejores condiciones de vida para sus comunidades.


En este sentido, las organizaciones fungen como portavoces de la población, ya que en ellas hay un número importante de personas que viven a diario la marginación y la pobreza, por ello… eso es a lo que el autor denomina “Democracia Profunda”.


Con esta lectura me he dado cuenta de que el ideal de democracia directa que Norberto Bobbio plantea como lejana, es posible, pues en éstas organizaciones los ciudadanos “tienen el derecho de tomar las decisiones que les atañen, y no sólo el de elegir a las personas que decidirán por ellos”.
Concluyendo, podemos decir, que este caso nos deja como lección, que es necesario que la población más desfavorecida se organice para que se haga escuchar tanto a en su país como a nivel internacional, para que de ésta manera se les tome en cuenta como un grupo que exige, que demanda, que no es más “un grupo marginado”, sino un grupo de personas que por el solo hecho de ser humanos tienen derecho a tener una vida digna.

CASO: MODELO PARTICIPATIVO DE GESTIÓN



Descripción general del caso:



En 1993, se le otorgo a
Aguas Argentinas s.a. (AAsa) la concesión de la gestión de los servicios de suministro de agua y saneamiento de la ciudad de Buenos Aires y otros 17 municipios vecinos. La ambición de la empresa de hacer llegar 700 litros de agua a todos los habitantes se vio frustrada; el consumo per capita de agua era de los más altos del mundo, mientras que gran parte de la población de la periferia no tenía acceso al servicio de agua, y aún menos al de saneamiento. En 1993, de los 9.2 millones de habitantes de la zona de concesión, sólo el 66% tenía acceso al suministro de agua y un 53% al saneamiento, debido a que en la zona se encontraban muchos asentamientos irregulares. El contrato de concesión no mencionaba específicamente ni a los vecinos excluídos de facto por encontrarse fuera del entorno planificado (como las villas miseria) ni a aquellos para los cuales los métodos usuales de expansión son económicamente inasequibles.
Desde el principio,
AAsa trabajó en diversas experiencias con los municipios y ONGs de los barrios. Desde 1999, se estableció el Programa Barrios Carenciados en colaboración con la Agencia reguladora (ETOSS). En esta línea se desarrolló el Modelo Participativo de G
estión, poniéndose en marcha en 40 casos en 2003.

Actores:

AAsa
ETOSS (Ente Tripartito de Obras y Servicios Sanitarios
OBC (Organización de Base Comunitaria)
ONG´s (Fundación Riachuelo, Eva Siglo XXI, entre otras)

Descripción del Modelo Participativo de Gestión:

La estartegia se basó en un método participativo que vinculara a todos los participantes para la consecución de soluciones beneficiosas para todas las partes. Además del suministro de agua y del saneamiento, el programa buscaba el refuerzo del papel institucional para garantizar la sostenibilidad del proyecto.
Las implicaciones de este programa incluyen no sólo la dimensión social de la salud pública, sino también temas más profundos como la obtención de la propiedad del suelo o de la ciudadanía. Un aspecto particular del
MPG es que no requirio que la propiedad del suelo estubiera regulada antes del inicio de los proyectos. El propio MPG permitío facilitar un proceso de regularización porque cuando la municipalidad llego a acuerdos y participo con los implicados en el proyecto, reconocio la legitimidad de los ocupantes de los terrenos. Los residentes, por otro lado, a través de su participación en los proyectos del MPG mejoron su capacidad de organización para conseguir ese proceso de regularización de sus títulos de propiedad y de mejora de sus condiciones de vida.

Resultados:

El programa posibilitó resultados concretos para los habitantes de estas zonas de escasos recursos: el acceso a los servicios de suministro de agua y saneamiento, así como la regularización de su propiedad.

Conclusiones:

El Modelo Participativo de Gestión es un programa viable y benefico para las familias de escasos recursos, que viven en asentamientos irregulares y que por ello carecen del servicios de agua potable.
Es un programa bueno, porque involucra a la comunidad en la solución del problema y también involucra a las ONG´s y al gobierno local.
Sin embargo, recordemos que el gobierno argentino le retiro la concesión a la empresa Aguas Argentinas ¿Sera que incurrió en iregularidades? o será que ¿El agua que suministraba no cumplia con las normas de calidad?
Esto me deja pensando si es bueno o no privatizar el agua…. Y también, me deja reflexionando acerca la viabilidad de cualquier proyecto que provenga de la iniciativa privada, porque en un principio puede que sea bueno, pero después puede tener fallas y vicios…

EL DERECHO A LA CIUDAD


“Somos parte de la ciudad y sin embargo, no somos esenciales para su transformación”


La ciudad es un espacio artificial construido por el hombre, por ello se transforma a la misma velocidad que la sociedad. Como dice David Harvey “el hombre cambia cambiando la ciudad”. Las transformaciones en la ciudad requieren de la energía colectiva para formar nuevos procesos de urbanización.

En este sentido, David Harvey concibe el Derecho a la Ciudad como “la libertad que tiene el ser humano de hacer y rehacer la ciudad”.

Harvey considera que la urbanización depende de personas con poder económico, por lo tanto existe una estrecha conexión entre el desarrollo del capitalismo y la urbanización.

Las revoluciones urbanas se han dado principalmente a dos ciclos económicos:
1. Las crisis económicas.
Durante este ciclo económico el principal gestor de las transformaciones urbanas es el gobierno, dado que reactiva la economía por medio de la inversión pública en infraestructura.
2. El auge o expansión económico
Durante el auge o expansión económica el que gesta las transformaciones es el sector empresarial, ya que construye todo tipo de infraestructura de acuerdo a sus necesidades para llevar a cabo la producción o transacción de mercancías o bien, para llevar a cabo transacciones financieras.

En este sentido, las transformaciones urbanas no han sido únicamente una cuestión de infraestructura, sino también una cuestión de cambios en la forma de vida de cada individuo. Sin embargo, aunque en todos y cada uno de nosotros inciden las transformaciones, solo el gobierno y las personas con poder económico pueden gestar los cambios en la ciudad.

El Derecho a la Ciudad, ese derecho de hacer y rehacer, se encuentra en manos privadas, esto trae como consecuencia que los espacios públicos sean privatizados y que las áreas urbanas se dividan en zonas ricas y pobres.

Existen, pues, dos tipos de ciudades en una, una en la que se encuentra el planeta de los edificios y otra en la que se encuentran los cinturones de miseria.Desde mi punto de vista, actualmente las transformaciones urbanas se gestan de manera unilateral, por ello, la gente común y corriente no tiene derecho a opinar y solo debe limitarse a adecuarse a las transformaciones. Por ello es imperante que la sociedad se organice y exija su “Derecho a la Ciudad”, ese derecho que por el solo hecho de ser habitante de la ciudad le corresponde, ese derecho de cambiarse cambiando la ciudad.

PROYECTOS QUE MATAN




El caso de los pozos de agua contaminados con arsénico en Bangladesh






Durante la década de los 70´s los habitantes de las comunidades más pobres de Bangladesh consumían aguas superficiales de ríos y estanques, pero estas aguas contenían un alto nivel de contaminantes y patógenos que causaban a la población enfermedades diarreicas y posteriormente la muerte.
Ante las altas tasas de mortalidad por diarrea, organismos internacionales y el Gobierno de Bangladesh pusieron en marcha un proyecto para abastecer de agua, libre de contaminantes, a la población. Dicho proyecto consistió en la construcción de pozos para la extracción de aguas subterráneas, ya que se pensaba que estas aguas eran de calidad y estaban aptas para el consumo humano. Sin embargo, el proyecto fue llevado a cabo sin hacer previos estudios acerca de la calidad del agua, ya que, según versiones del gobierno, en aquellos años aun no se acostumbraba a hacer estudios hidrogeológicos. En este sentido, las organizaciones internacionales que participaron en el proyecto- ONU, FAO y UNICEF- ya tenían conocimiento de otros casos en los que el agua subterránea presentaba un alto nivel de contaminación por arsénico, sin embargo, prefirieron hacer caso omiso de ello y seguir adelante sin tomar precauciones.
En los años 90´s, la población que consumía el agua extraída de pozos construidos por la cooperación internacional y el gobierno, empezó a presentar signos de envenenamiento por arsénico. Envenenamiento que produjo en la población patologías dérmicas, renales, pulmonares, cancerígenas y cardiacas, que hasta la fecha siguen matando a un número elevado de personas.
Millones de enfermos y un alto número de personas muertas, hicieron que el gobierno de Bangladesh así como la cooperación internacional reconocieran que el agua de los pozos contenía arsénico en proporciones elevadas, por lo que se dieron a la tarea de marcar de rojo los pozos que contenían aguas contaminadas con el metal y con verde los que estaban libres de este. Sin embargo, estas acciones han sido insuficientes, pues el número de pozos existentes es alto y en muchas comunidades es el único medio por el cual se puede obtener agua, por lo que pese a que tienen conocimiento de que el agua esta contaminada la siguen consumiendo.
Conclusiones:
1. El proyecto de los pozos fue hecho a la desmesura, pues se quería bajar rápidamente la tasa de mortalidad por diarrea. En este sentido, considero que cualquier proyecto que ponga en juego la vida humana, debe ser elaborado con tiempo y bajo el respaldo de un grupo de expertos que abalen la seguridad y viabilidad del proyecto.
2. Pese a que se ha reconocido que hay una intoxicación masiva por el arsénico, no se ha llevado a cabo un proyecto efectivo que frene la intoxicación de los habitantes, pues no se han buscado métodos efectivos de purificación de aguas superficiales, lo cual ha generado que los habitantes sigan consumiendo aguas contaminadas.

Ante esto, los habitantes de Bangladesh se preguntan ¿Qué es mejor? ¿Intoxicarse con arsénico o morir de diarrea? ¿Tomar agua contaminada o morir de sed? Es una encrucijada…. De la cual no pueden escapar y no tienen opción….